La comida y nuestro estado de ánimo en el trabajo

Autor: Daniela Molina
Equipo Comunicaciones
Fecha de publicación: 22/08/23

La relación entre la comida y nuestro estado de ánimo es innegable, lo que comemos puede tener un impacto profundo en cómo nos sentimos, y esto se vuelve particularmente relevante en el ámbito laboral. Pasamos una parte significativa de nuestras vidas en el trabajo, por lo que entender cómo la comida afecta nuestro estado emocional y mental en este entorno es crucial para optimizar nuestra productividad y bienestar. Nuestra dieta influye en la recarga de sustancias químicas que le suministramos a nuestro cuerpo, que afecta directamente a nuestro cerebro y por ende tiene relación en cómo nos comportamos diariamente.

La conexión entre la comida y el estado de ánimo se basa en una compleja interacción entre la nutrición y la química cerebral. Los alimentos que consumimos proporcionaron los nutrientes necesarios para la producción de neurotransmisores, como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina, que desempeñan un papel crucial en la regulación del estado de ánimo y las emociones. Por ejemplo, la serotonina es conocida como la "hormona de la felicidad" y está relacionada con la sensación de bienestar y calma.  

Los alimentos y la reacción de nuestro cuerpo nos indisponen de manera negativa en nuestro trabajo, causándonos inflamación y sensación de pesadez a lo largo del día, el consumo de algunos alimentos genera malestar general disminuyendo la productividad y compromiso con las labores desequilibrando el microbiota, la cual ha sido relacionada con problemas mentales y depresivos.

Las exigencias en el trabajo deben estar fortalecidas por una buena alimentación, por eso te recomendamos tomar conciencia de estas prácticas:

1. Si debes estar expuesto al sol: Procura aumentar o incorporar en tu dieta, el consumo de agua, sueros orales, y sales minerales para evitar la deshidratación que podrá causar los rayos de sol.
2. Requieres de mucha energía para cumplir con tus labores: Consume la mayor cantidad de proteínas magras durante las primeras horas del día, la reserva de la mañana es una de las más importantes para lograr tener energía en el día.
3. Si sueles estar sentado la mayoría del tiempo: Consume buenas cantidades de agua y frutos secos, moderando el consumo de cafeína, de esta forma, se evitarán tener síntomas de estrés y ansiedad que en algunos casos es causado por el consumo desmesurado de cafeína.

De la misma forma, algunas alternativas saludables son:  Aumentar el consumo de agua, lácteos, hidratantes ricos en sales minerales, frutos dulces y nueces, estos aportarán vitalidad y energía de una forma más natural para nuestro cuerpo. Así mismo es importante moderar el consumo de embutidos ultra procesados, empaquetados y enlatados.

Haz de tu rutina diaria una experiencia gratificante para ti y para tu cuerpo, alimentándote de manera acertada e inteligente, esto traerá una sensación de vitalidad para tu día a día, es común descuidarnos en nuestra alimentación, pero sabemos que el tiempo y el cuerpo nunca paran su ritmo.

Finalmente, la comida que consumimos tiene un impacto significativo en nuestro estado de ánimo y bienestar en el trabajo, optar por alimentos saludables y equilibrados puede mejorar la concentración, energía y la claridad mental, lo que a su vez se traduce en un desempeño laboral más satisfactorio. Al tomar decisiones conscientes sobre nuestra alimentación en el trabajo, podemos cultivar un entorno propicio para el éxito y el bienestar emocional. 

¡De una buena alimentación te beneficias tú y tu entorno!